¡Y todos quedaron llenos del Espíritu Santo!

Comentario domingo de Pentecostés, ciclo "B"

“Ven en Espíritu Santo, llena los corazones de tus fieles, y enciende en ellos el fuego de tu AMOR; envía Señor TU ESPIRITU y todo será RENOVADO". Amén

Hoy es el día que actuó el SEÑOR en favor de su PUEBLO, sea nuestra alegría y nuestro gozo. Nacimos un día como hoy para formar LA IGLESIA DE CRISTO. El Espíritu Santo se derramó sobre cada uno de ellos y todos quedaron "llenos de ÉL" y también se derrama hoy sobre aquellos "creyentes" que se abren a su GRACIA y reciben los "dones de su fuego de Amor"; fuego que "purifica, fortalece y congrega en la UNIDAD Y DIVERSIDAD.

El Apóstol San Pablo en la segunda lectura de hoy nos dice: "el Espíritu concede diferentes dones (carismas) pero el que los concede es "El mismo ESPIRITU". Cada cual recibe su "don", no para provecho propio sino para la edificación del  cuerpo, que es LA IGLESIA. Fuimos Bautizados para formar UN SOLO CUERPO por medio de un solo ESPÍRITU.

Debemos respetamos en nuestras diferencias, las cuales no deben ser nunca factor de división ni enfrentamientos, sino de complemento y enriquecimiento mutuo. ¡Basta ya de "guerrillas y de contiendas entre nosotros"; ha llegado la hora de decirle SÍ a un DIALOGO lleno de AMOR Y DE PAZ; constructivo y fecundo: "No coincido en todo con tus puntos de vista pero vamos a trabajar juntos en un solo ESPIRITU; TOMEMOS LA "COPA DE LA UNIDAD" en medio de la diversidad como preámbulo de nuestra labor conjunta.

Es este uno de los fines de nuestra EUCARISTIA DOMINICAL donde "comemos de un mismo PAN y bebemos de un mismo cáliz". ¡Ven Espíritu Santo! Únenos en tú AMOR, que tus dones nos enriquezcan y fortalezcan para seguir trabajando juntos por TU REINO. Amen

Pbro. Pablo Urquiaga.

Imagen de Cerezo Barredo

Unidos en Cristo

Comentario  del 5to domingo del tiempo de Pascua, ciclo "B"

Como la rama desprendida del tronco de un árbol no puede dar frutos; tampoco nosotros, si estamos desunidos no podremos lograr nada. El Señor nos ha dado diferentes dones o carismas para que podamos dar mucho fruto y eso solo es posible si nos mantenemos unidos en el amor de Cristo Jesús. Aquel que no de fruto será cortado y arrojado fuera y a los que lo den, serán "podados"; es decir, purificados" para que los den más y mejor. Jesucristo es el tronco, nosotros somos las ramas; Él nos corrige y nos exhorta que demos frutos abundantes para el bien de los demás. Así le pasó al apóstol Pablo en su "conversión"; era necesario "podarlo"; también nos pasa a nosotros cuando perdemos de vista nuestra Misión.

Acabamos de realizar una "Asamblea Parroquial donde cada uno tuvo la oportunidad de descubrir sus "talentos" y así se pudo colocar en la base del árbol que le correspondía. Unos serán catequistas, otros ministros de los enfermos, de la liturgia, de la Palabra; otros trabajarán en Pastoral Familiar, con los matrimonios y ancianos en la pastoral social atendiendo a las viudas y hermanos en condición de calle y también en el mantenimiento de nuestro Centro Parroquial. Los jóvenes de Pastoral Juvenil se formarán para ser testigos de Cristo ante sus demás compañeros en el Liceo o en los centros de trabajo y realizarán su apostolado en las áreas de música,canto, teatro, deportes y otras actividades que vayan surgiendo. Todos son importantes y necesarios, cada cual según sus capacidades, pero solo hay un árbol que es la IGLESIA, en la cual debemos permanecer UNIDOS EN CRISTO, EN UN SOLO CUERPO.

Es importarte el "esqueleto" (la nueva estructura) que hemos formado pero hace falta el ESPIRITU que le de vida. La ORACIÓN Personal Y COMUNITARIA es imprescindible para quedemos frutos abundantes, sobre todo la EUCARISTÍA de los domingos, allí recibimos la "savia” que nos .alimenta y renueva.

ARBOL FRONDOSO de La Resurrección del Señor, adelante; permanezcamos unidos en Cristo buscando siempre su gloria. Amén

Pbro. Pablo Urquiaga.

Imagen de Cerezo Barredo