viernes, 19 de julio de 2019

Las cinco mejores conclusiones de Gaudete et Exsultate y la Santidad

“¡Regocíjate y sé feliz!” Es lo que Jesús dijo en el Sermón de la Montaña. Es también el título de la nueva Exhortación Apostólica del Papa Francisco sobre la santidad en la vida cotidiana. ¿Por qué deberíamos “regocijarnos y ser felices”? Porque Dios, como nos recuerda el Papa Francisco, nos llama a todos a ser santos. Pero ¿cómo podemos responder a tal llamado?
Bueno, aquí hay cinco conclusiones de la nueva y muy práctica Exhortación del Papa Francisco.
1.  Santidad significa ser tú mismo
El Papa Francisco nos ofrece muchos ejemplos de vidas santas a través de su documento: Santa Teresa de Lisieux, la Carmelita francesa que encontró la santidad haciendo pequeñas tareas; San Ignacio  de Loyola, el fundador Jesuita que buscó encontrar a Dios en todas las cosas; San Felipe Neri, el fundador de los Oratorianos famoso por su sentido del humor.
Los Santos rezan por nosotros y nos dan ejemplos de cómo vivir, pero no estamos destinados a ser versiones de ellos. Estamos destinados a ser nosotros mismos, y cada creyente está destinado a “discernir su propio camino” y sacar los mejor de si mismos.” Como lo dijo Thomas Merton, “Para mí ser un santo significa ser yo mismo.
2.  La vida cotidiana puede conducir a la Santidad
No necesitas ser un Obispo, un sacerdote o un miembro de una orden religiosa para ser Santo. Cada uno está llamado a ser un Santo, como nos lo recuerda el Concilio Vaticano II— una madre o un padre, un estudiante o un abogado, un maestro o un conserje. “Santos al lado,” el Papa Francisco los llama. Todo lo que necesitamos es “vivir nuestras vidas en amor” y “dar testimonio” a Dios en todo lo que hacemos.
Eso tampoco tiene que significar grandes acciones dramáticas. El Papa Francisco ofrece ejemplos de santidad cotidiana, como un padre amoroso que cría a un niño; así como también “pequeños gestos” y sacrificios que uno puede hacer, como decidir no contar chismes. Si usted puede ver su propia vida como una “misión,” entonces usted pronto se da cuenta de que usted puede simplemente ser amoroso y amable para avanzar hacia la santidad.
Tampoco tiene que “desmayarse en éxtasis místico” para ser un Santo o caminar con los “ojos bajos.” Ni se debe retraer de otras personas. Por otro lado, no querrás quedarte atrapado en la “carrera de rata” de correr de una cosa a otra. Un equilibrio entre la acción y la contemplación es esencial.
3.  Dos tendencias a evitar: Gnosticismo y Pelagianismo
EL Papa Francisco puede enviar a las personas en una carrera hacia cualquiera de sus diccionarios o sus libros de textos de teología cuando nos pide que evitemos dos peligros en la vida espiritual.
El primero es el Gnosticismo, de la palabra Griega Gnosis, para saber. EL Gnosticismo es la vieja herejía que dice que lo que más importa es lo que sabes. No hay necesidad de ser caritativo o de hacer buenas obras. Todo lo que necesita es el enfoque intelectualcorrecto. Hoy el Gnosticismo, tienta a las personas a pensar que ellos pueden hacer la fe “completamente comprensible” y los conduce a querer forzar en otros a adoptar su manera de pensamiento. “Cuando alguien tiene una respuesta para cada pregunta,” dice el Papa Francisco, “es una señal de que ellos no están en el camino correcto.” En otras palabras, ser un sabelotodo no te va a salvar.
La segunda cosa a evitar es el Pelagianismo, llamado así por Pelagio, el teólogo del Siglo V asociado con esta idea. El Pelagianismo dice que nosotros podemos cuidar de nuestra salvación a través de nuestros propios esfuerzos. Los Pelagianos confían en su propios poderes, no sienten que necesitan la Gracia de Dios y actúan superiores a otros porque ellos observan ciertas reglas.
Los Pelagianos de hoy a menudo tienen, dice el Papa, “una obsesión con la ley, una absorción con las ventajas sociales y políticas, preocupación puntillosa con la liturgia, la doctrina y el prestigio de la Iglesia.” Es un peligro real para la Santidad porque nos roba la humildad, nos pone sobre los demás, y deja poco espacio para la Gracia.
4.   Se amable
“Gaudete et Exsultate” está lleno de consejos prácticos característicos del Papa Francisco para vivir una vida de Santidad. Por ejemplo, no chismes, deje de juzgar y, lo más importante, deje de ser cruel.
Esto va para acciones en línea, también. Los comentarios del Papa Francisco sobre este tema son memorables. En línea, él escribe, “la difamación y levantar calumnias puede convertirse en algo común … ya que las cosas pueden decirse allí que serían inaceptables en el discurso público, ya que las personas buscan compensar su propio descontento atacando a los demás…. Al afirmar respetar otros mandamientos, ellos completamente ignoran el octavo, que prohíbe levantar falsos testimonios ni mentir y vilipendiar despiadadamente a los demás.”
Para ser Santo, sé amable.
5.  La Bienaventuranzas son una hoja de ruta para la Santidad
Como se puede adivinar por el título del documento, las Bienaventuranzas, la lista de Jesús de “benditos ares,” son centrales para esta Exhortación. La Bienaventuranzas no son sólo que que Jesús quiere decir por Santidad, sino que también son un retrato de nuestro Señor mismo. Así que estamos llamados a ser pobres en espíritu, mansos, pacificadores, a tener hambre y sed de rectitud, y así sucesivamente.
Pero permítanme centrarme en una Bienaventuranza: “Bienaventurados los misericordiosos.” El Papa Francisco dice que la misericordia, uno de los temas centrales de su Papado, tiene dos aspectos: ayudar y servir a los demás, pero también perdonar y comprender. Jesús no dice, “¡Bienaventurados son aquellos con traman venganza!”
Y, ¿cuál es el resumen general de Santidad del Papa Francisco? Se basa en las Bienaventuranzas: “Ver y actuar con misericordia.”
El reverendo James Martin, SJ, es un sacerdote jesuita, autor y editor general de America the Jesuit Review                                    
* Artículo reproducido con el debido permiso de America the Jesuit Review. America the Jesuit Review no se hace responsable por la traducción. La traducción ha sido realizada por Francisco Luciani para Teología Hoy.
Cortesía de :http://www.teologiahoy.com/

LA CONTEMPLACION Y LA ACCIÓN


Comentario domingo 16° Tiempo ordinario, ciclo "C"

Marta y María eran las hermanas de Lázaro, el amigo de Jesús y el acostumbraba a hospedarse en su casa (Betania) que distaba a unos pocos kilómetros de Jerusalén. Al llegar Jesús aquel día, Marta se dedicó a arreglar la casa y prepararle algo de comer mientras María lo recibió y se puso a sus pies a ESCUCHARLE y a HABLAR CON ÉL. Entonces Marta le reclama a Jesús que su hermana le ha dejado todo el trabajo a ella pero Jesús le responde: “Marta, Marta. Tú te afanas por muchas cosas pero tu hermana María ha escogido la mejor parte y nadie se la quitará” (Lc. 19, 42)

 Jesús no desprecia el SERVICIO de Marta pero pone en primer lugar la actitud CONTEMPLATIVA de su hermana. En la primera lectura de hoy aparece Abraham sentado en su tienda cuando Dios se le aparece a través de tres peregrinos que llegan a su campamento; al verlos, se dirige hacia ellos y se postra diciéndoles: “Señor mío, si he hallado gracia a tus ojos, te ruego no pases de largo sin detenerte. Hare que traigan un poco de agua para que se laven los pies y puedan descansar; traeré pan para que recuperen las fuerzas y después continuaran su viaje pues para eso han pasado junto a su siervo. Ellos contestaron: Está bien, haz lo que dices. Y Abraham lo hizo y se quedó contemplándolos mientras comían. 

El practicó las dos virtudes: CONTEMPLAR Y ACTUAR para darnos una enseñanza. Primero debemos escuchar al Dios que pasa; dejó lo que estaba haciendo y se puso a servirles. Tenemos que salir de nuestro Egoísmo para poder compartir con aquellos que carecen lo que nosotros tenemos en abundancia. Siempre recibiremos la recompensa. “El año que viene Sara tu mujer tendrá un Hijo”. (Gen. 18,10) Aleluya. 

Pbro. Pablo Urquiaga.
Imagen de Cerezo Barredo




viernes, 12 de julio de 2019

ANDA Y HAS TÚ LO MISMO


Comentario domingo 15° Tiempo ordinario, ciclo "C"

Deuteronomio 30,10-14
Colosenses 1,15-20
Lucas 10,25-37

Tiéndele la mano al que veas necesitado, muéstrate compasivo con el que sufre y padece; no te lamentes ni sientas “lastima”; socórrele y “ocúpate” de su problema como si fuese el tuyo y trata de ayudarle según tus posibilidades. No pases indiferente e insensible ante tu prójimo herido; detente, deja tu “zona de confort”; bájate de tu cabalgadura; cura sus heridas utilizando tu propio aceite; levántalo de su indigencia y atiende a sus necesidades. Haz todo lo que este de tu parte para liberarlo de su mal. Haz eso y vivirás; tendrás la VIDA ETERNA. 

Para heredar la Vida Eterna hay que cumplir con el MANDAMIENTO DE DIOS: “Amarlo a EL en tu PRÓJIMO”. Eso será lo único que cuente para la SALVACIÓN. No importa la “religión” que profeses, ni las “prácticas religiosas y rituales”, ni la forma de rezar o de alabar; ellos solo te servirán si te ayudan a AMAR A TU PRÓJIMO porque lo que importa es AMAR. Se trata no solo de proclamar la FE sino de VIVIRLA; practicarla como lo hizo el Samaritano. Haz lo mismo y vivirás, NOS DICE Jesús. 

Recordemos que el SAMARITANO es un ser despreciable para los judíos; era considerado como un “bastardo” (hijo ilegítimo) y sin embargo, Jesús lo pone “comportamiento ejemplar” porque tuvo “Amor visceral”; es el amor de Dios que toma en serio la suerte del ser humano sin importarle su condición. Sin embargo el “sacerdote” lo vio y pasó de largo; se dio cuenta de que estaba medio muerto pero no se quiso “involucrar” pues era muy incómodo y peligroso detenerse en aquel camino; los asaltantes podrían estar escondidos y lo podían asaltar a él. ¿Y si se le muere en sus brazos? ¿Qué iba a hacer? Además soy sacerdote y no puedo contaminarme con un muerto…y siguió de largo. 

Pbro. Pablo Urquiaga.
Imagen de Cerezo Barredo



martes, 9 de julio de 2019

Castillo: "Ni Jesús fundó templo alguno, ni quería templos"


¿Qué tiene que ver el esplendor litúrgico de nuestras catedrales (mal imitado en tantas parroquias) con la sencillez pobre y humilde que se relata en el Evangelio?"

"Lo que tiene que hacer la Iglesia no es poner al día la religión del templo y de los sacerdotes, que es la religión a la que se enfrentó Jesús, sino vivir y explicar el Evangelio"

El papa Francisco, sólo con su forma de ser y de vivir, le ha dado una nueva orientación al papado. Una orientación más humana y más evangélica. Esto es capital. Pero no basta.

Lo importante ahora es concretar esta nueva orientación, tomando decisiones que modifiquen la Iglesia, en cosas concretas, cosas que vea y palpe la gente. Y, sobre todo, cosas que son necesarias y apremiantes.
Empezando por la liturgia, que suele ser lo que la gente ve, oye y palpa en cuanto entra en una iglesia. Es un hecho que las ceremonias, a las que asistimos en los templos, tienen su origen no precisamente en la forma de vida que llevó Jesús y que nos relatan los evangelios.
Ni Jesús fundó templo alguno, ni quería templos. Y menos aún las solemnidades, la pompa y el boato de la corte imperial, que es lo que la Iglesia copió, en los siglos IV y V, para recordar la vida de Jesús, que nació en un establo; y la muerte de Jesús que acabó colgado como un delincuente subversivo.
¿Qué tiene que ver el esplendor litúrgico de nuestras catedrales (mal imitado en tantas parroquias) con la sencillez pobre y humilde que se relata en el Evangelio? 
Además – y por si era poco – abundan los templos y catedrales en los que hay que pagar dinero para entrar a verlos. Y se cobra dinero por los sacramentos que se administran, se le saca dinero al Estado, se obtienen privilegios fiscales, etc., etc.
Por supuesto, los problemas que tiene que afrontar la Iglesia en la Amazonía son muy distintos de los problemas que tiene que resolver en Europa. Pero, lo mismo en la Amazonía que en Europa, lo que tiene que hacer la Iglesia no es poner al día la religión del templo y de los sacerdotes, que es la religión a la que se enfrentó Jesús,sino vivir y explicar el Evangelio, que consiste esencialmente en actualizar la forma de vida que practicó el mismo Jesús. 
Desde este punto de vista, lo que más urge en este momento es analizar a fondo si la vida de los sacerdotes y religiosos ayuda a la gente a entender y vivir el Evangelio. Y si la liturgia y los sacramentos son, en este momento, las prácticas adecuadas y comprensibles, para que la gente encuentre respuesta a las muchas preguntas que hoy nos preocupan y hasta nos asustan en tantas situaciones que ya no admiten espera.   
Cortesía de https://www.religiondigital.org

domingo, 7 de julio de 2019

El Papa advierte de que la destrucción de la Amazonía “tendrá repercusiones a nivel planetario”


Francisco, a 'Comunidades Laudato Si’: “Sean el germen de una forma renovada de vivir”

Mensaje del Papa Francisco dirigido al 2º Foro de las 'Comunidades Laudato si' que se celebra hoy en la localidad italiana de Amatrice

Son un movimiento de personas y asociaciones comprometidas en la difusión del pensamiento de esta encíclica del Santo Padre

El Papa destaca tres palabras: doxología, eucaristía y ascesis para vivir el cristianismo de una forma renovada en estrecha relación entre el respeto a la Casa Común y la justicia social.

(Vatican News).- En su Mensaje, el Papa Francisco dirige su saludo cordial a los organizadores y a los participantes en este II Foro de las Comunidades Laudato si', que se celebra en un territorio devastado por el terremoto que sacudió el centro de Italia en agosto de 2016 y que, más que otros, ha pagado un precio muy alto en número de víctimas. Expresa su deseo de que estas comunidades “sean el germen de una forma renovada de vivir el mundo, de darle futuro, de preservar su belleza e integridad para el bien de todos los seres vivos”.

Doxología, eucaristía y ascesis

El Papa además destaca tres palabras: doxología, eucaristía y ascesis. Para el Papa, una de las cosas más necesarias es la capacidad de alabar a Dios o la también llamada “doxología”: “Ante tanta belleza, con admiración renovada, con ojos infantiles, debemos ser capaces de apreciar la belleza que nos rodea y de la cual está tejido también el hombre” explica Francisco en el mensaje.
También pide una actitud eucarística ante el mundo y sus habitantes: “Todo se nos da de forma gratuita, no para ser depredado y fagocitado, sino para que se convierta a su vez en don  para compartir, don para entregar, para que la alegría sea para todos y sea, por ello, más grande”. Por último, pide una actitud ascética, asegurando que toda forma de respeto surge “de la capacidad de saber renunciar a algo por un bien mayor, por el bien de los demás”.

Las Comunidades 'Laudato si' 

Son un movimiento de personas y asociaciones comprometidas en la difusión del pensamiento de esta encíclica del Santo Padre. Originalmente fueron concebidos por la Iglesia de Rieti y por Slow Food, y adoptan y promueven estilos de vida coherentes con los valores y propuestas del documento firmado del Papa Francisco, tanto a nivel personal y colectivo, como a través de encuentros y conferencias, o llevando a cabo acciones concretas e iniciativas prácticas.
En Italia hay algunas decenas de comunidades activas, mientras otras se encuentran en proceso de creación. Están presentes en todo el país y tienen bases en veinte localidades, en las provincias de Turín, Cuneo, Asti, Novara, Mantua, Milán, Varese, Pavía, Treviso, Vicenza, Padua, Rieti, Roma, Foggia, Ragusa, Agrigento, Trapani y Caltanissetta.
También comienzan a formarse en otros países, como en el caso de la ciudad de Brasilia en Brasil. Con su compromiso, estas Comunidades contribuyen al movimiento ambiental desde el punto de vista de la "ecología integral", es decir, siempre teniendo en cuenta la estrecha relación que existe entre el respeto a la Casa Común y la justicia social.

LA MISIÓN DEL DISCÍPULO


Comentario domingo 14° Tiempo ordinario, ciclo "C"

Isaías 66,10-14c
Gálatas 6,14-18
Lucas 10,1-12.17-20

Por ser discípulos, somos embajadores de Cristo. Nuestra misión es preparar los corazones de los que se van a encontrar con Jesús; siendo testigos ante aquellos que hemos sido enviados. Lo hacemos de dos en dos para así mostrar su AMOR por la manera de abordarlos. Somos muy pocos “misioneros” (obreros) y es mucho el trabajo por hacer. El ambiente es muy fuerte y muy hostil; es por eso que Jesús nos dice: “los envío como corderos en medio de lobos”. La tarea no es nada fácil. Debemos ir “ligeros de equipaje” (llevar lo imprescindible). Para cumplir la misión no es necesario llevar provisiones ya que el “obrero merece su sustento”; lo que sí tenemos que llevar es el “poder del Espíritu Santo” para ser protegidos y capacitados para sanar y liberar a los oprimidos por el diablo. 

Debemos tener claro donde debemos ir para que sea el ESPÍRITU el que nos mueva y no nos vayamos a entretener ni distraer en el camino. Se nos manda a visitar a la gente en su propia casa. Al llegar debemos trasmitirles la Paz del Señor; si hubiera gente de Paz, esa Paz manaría como un río; sino, volvería a nosotros. Si nos reciben deberíamos quedarnos allí y no seguir de largo; comeríamos y beberíamos de lo que tengan ya que vamos en el nombre del SEÑOR JESUS. Con el PODER que se nos ha dado, sanaríamos a los enfermos que allí hubiere (sean enfermos físicos como espirituales); liberaríamos a los que estén poseídos por demonios (como pueden ser el odio, la venganza, el miedo, la angustia, la ansiedad, el desaliento, etc.). El Señor nos ha dado la potestad de pisotear serpientes y escorpiones y si nos dan un “veneno mortal”, no nos hará daño.

 Cuando no nos reciban, salgamos fuera y nos “sacudiremos el polvo de nuestros pies”; es decir, no permitamos que la ingratitud y el desprecio nos desanime a seguir predicando que: “EL REINO DE DIOS SE HA ACERCADO A USTEDES” y aquellos que lo rechacen tendrán que rendir cuentas.

Pbro. Pablo Urquiaga.
Imagen de Cerezo Barredo


viernes, 22 de marzo de 2019

Gustavo Gutiérrez pide que San Romero de América sea declarado Doctor de la Iglesia


El dominico resume la vida del prelado salvadoreño canonizado por Francisco el pasado octubre: "El amor hacia otra persona vale más que todas las teologías"

Precisa que el santo nunca sufriera una "conversión" a los pobres, sino que ya estaba en otro "proceso" de solidaridad antes de la publicación de su 'Teología de la Liberación' en 1971

Una propuesta "excelente", ya que "el amor hacia otra persona vale más que todas las teologías". De esta forma ha calificado el 'padre de la Teología de la Liberación', Gustavo Gutiérrez, la campaña para hacer San Óscar Romero Doctor de la Iglesia
Gutiérrez, cuyo libro de 1971 Teología de la Liberación: Perspectivas introdujo en el pensamiento de la Iglesia la "opción por los pobres", se dirigía así por internet a los participantes de los 'Romero Days', un evento patrocinado por la Universidad de Notre Dame, EEUU, en honor al arzobispo de San Salvador asesinado por militares del país centroamericano en 1980.
Según lo recogido por el CNS, el gran teólogo dominico explicó que aunque Romero, canonizado el pasado octubre por el Papa Francisco, escribía mucho y bien sobre la necesidad de solidaridad con los pobres, "no hay mucho que apoye" la tesis de que el prelado abrazara todo lo que implicaba la Teología de la Liberación.
"No podemos decirlo", recalcó Gutiérrez, ya que San Romero había emprendido un camino distinto, habiendo experimentado la pobreza en el Salvador oriental ya en 1970, cuando servía en la zona. Un camino que le condujo al prelado a hacer "avances" propios en términos de paliar este sufrimiento, precisó el teólogo.
"Mucho se ha hablado de la conversión de Romero y la gente tiene derecho a decir lo que piensa", apuntó Gutiérrez, añadiendo que solo quería decir que "no estoy de acuerdo" con que Romero sufriera una "conversión" a los pobres, y que lo describiría más bien como un "proceso" guiado por las injusticias que palpó. Luego, aunque San Romero siempre mantenía cierta "desconfianza" hacia determinados movimientos eclesiales latinoamericanos, afirmó Gutiérrez, tenía la mente siempre abierta, y tuvo la humildad de decir "Necesito aprender".
Gutiérrez explicó que esta mente siempre abierta del prelado la descubrió muchos años después de su primer encuentro, cuando el teólogo descubrió en el diario del santo la observación de que "el padre Gustavo era diferente a lo que la gente me había dicho". Pero no es que Gutiérrez tuviera dudas de que un día Romero llegaría a ser santo. Ver su canonización años después "fue un gran placer, pero, como muchos, sabía que vendría", apostilló Gutiérrez.