Muchas cosas se han hecho y se hacen en nombre de Dios, cristianos
salen con fuertes corceles a “liberar” Tierra Santa, eliminando a los pueblos
que siempre vivieron en ellas,
terroristas practican juegos de muerte con rehenes, despreciamos a los que en una
segundas nupcias encuentra a Dios en el cuerpo de otro o profanamos a nuestra
Madre Tierra con globos de helio liberados en el aire, es como si el segundo
mandamiento de nuestra Iglesia Católica solo se limitara a juramentos en
nuestros labios; “no tomarás en falso el nombre del
Señor tu Dios” (Ex 20, 7; Dt 5,
11).
Este segundo mandamiento
que prescribe respetar el
nombre del Señor, pertenece, como el primer mandamiento, a la virtud de
la religión y no solo regula el uso de nuestra palabra en las cosas santas sino
que también nuestro actuar y vivir en nombre de Dios.
Jorge
Mario Bergoglio el 24 de mayo 2015 escribe con el título "Laudato si"
("alabado seas") haciendo referencia a una oración de San Francisco,
y que es, además, el patrón de la ecología “Dios perdona siempre, los
hombres a veces, la tierra no perdona nunca”.
Pedro
Casaldaliga cmf plantea que la violencia con pseudofundamento religioso es la
más brutal de todas, porque absolutiza la causa de la agresión: “Dios lo
quiere”, “por Alá”, “en nombre de la Tierra Santa”, “para la Virgen”, y a
continuación llegan las mayores atrocidades; Casaldaliga era testigo de cómo el “pulmón de la Tierra” se veía, y se ve, totalmente
amenazado por la deforestación.
Tanto El Papa Francisco (Jorge Mario Bergoglio) como Pedro Casaldaliga denuncian
contra la falta de voluntad de proteger el planeta, insisten que la destrucción
de la “creación” perjudica a todos.
El Papa señala la existencia de una
“verdadera deuda ecológica” en la que todos somos corresponsables.
Hoy por hoy Pastoralistas, Iglesias,
Profesores, Partidos Políticos, Medios de Comunicación participan del problema
ambiental al soltar globos para elevarse al aire, Participando así en la
extinción de la vida marina y silvestre y aumentando los desechos sólidos (basura)
en nuestras ciudades y Parques.
Ambientalistas han confirmado que la liberación de
globos amenaza significativamente al
ambiente y hacen un llamado a la ciudadanía para que dejen esa práctica que
atenta contra el ecosistema, ya que estos regresan a la tierra en forma de
basura, particularmente basura llena de buenas intenciones y hago referencia al
refrán popular “De buenas intenciones está lleno el camino del infierno.
Los globos se elevan en el aire y nosotros atónitos
vemos como desaparecen de nuestros pensamientos en cuestión de momentos, pero
no del medio ambiente. Estos son percibidos como una celebración de vida: El
nacimiento de un niño, aperturas, ferias, rosarios misioneros, navidad,
cumpleaños, buenos deseos, aniversarios, entre otros; pero para nuestra fauna
silvestre, muchos de estos globos (formas de plástico) significan la muerte.
Los globos son ingeridos por ballenas, delfines, tortugas, focas, peces y aves
acuáticas, quienes inocentemente creen que son comida como si fuera un calamar
o tentáculos de medusa marina. Se sabe que las aves se ahogan tras quedar
enredadas entre los restos de globos y que otras mueren de hambre tras comer
los restos que obstruyen sus tractos digestivos.
Por lo que se afirma que un globo en el aire no es
ningún motivo de celebración, sino una posible sentencia de muerte para el
planeta.
Es difícil evaluar la magnitud del problema dada la
falta de estudios sistemáticos y la colaboración de las autoridades, ya que no
muestran interés en frenar esta práctica o eliminar el problema.
Cabe destacar que la práctica de soltar globos, se
encuentra entre las cinco primeras causas de muerte en aves halladas en las
playas. De igual manera, se han encontrado tortugas muertas con restos de globos
en sus intestinos; para los docentes que gustan de las estadísticas en un estudio
de las playas, halló que el número de restos de globos había aumentado de 3.4 a
11.5 globos por kilómetro. En el día mundial de las Playas del 2004 hallaron
63.000 globos en todo el mundo.
Te invito a reflexionar y tomar mejores decisiones la
próxima vez que tengas una celebración que incluya soltar globos, podemos ser
más creativos y no abusar siempre de la misma práctica.
¿Te gustaría tomar el reto y crear conciencia con tus
amigos, colegas y familiares sobre el tema?
¿De
qué otra manera podemos celebrar que no atente contra el ambiente?
Ayer el pueblo de Dios en el Éxodo
clamaba liberación hoy nuestra Pachamama
(Madre Tierra) grita protección.
Prof.
José H. Castellano
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