Comentario domingo 1° de adviento, ciclo "C"
Este fue el lema de la visita del papa Juan Pablo II cuando vino a Venezuela. Es también un lema del ¡ADVIENTO!; un tiempo para despertar y reaccionar. Tiempo de GRACIA (KAIROS); de Salvación, donde se nos invita a prepararnos a una “doble venida”. En la Navidad celebramos la primera venida de Cristo a éste mundo, de forma humilde y sencilla; la recordamos para que “renazca en nuestros corazones” y la segunda venida será cuando venga “al final de los tiempos a liberarnos de toda corrupción” e implantar definitivamente SU REINO EN ESTA TIERRA.
La Palabra de Dios en éste primer domingo de Adviento nos invita a estar despiertos (alertas) pues no sabemos ni el día ni la hora que el SEÑOR venga a implantar su JUSTICIA sobre la tierra (Jer. 33,16). Él nos descubre “sus caminos de Salvación” (Salmo) que son su Amor y su Verdad. Es un tiempo de Conversión; es decir, de volver a Jesús y dejar todo lo malo detrás de nosotros; de ser TRANSPARENTES delante de Dios y de mis hermanos los hombres. ¡Basta ya de Hipocresías!
Tengamos cuidado que los “vicios”; el libertinaje, las borracheras y las preocupaciones por las cosas de ésta vida nos emboten el corazón y la mente y no nos dejen disfrutar la alegría del encuentro con el Señor cuando el vuelva ni la celebración de una NAVIDAD CRISTIANA (no pagana). ¡Dichoso aquel que cuando vuelva el Señor, lo encuentre trabajando por las cosas de su Reino!
El Adviento es tiempo de VIGILIA Y ORACIÓN; revisión de vida, de perdón, misericordia y reconciliación personal y familiar. ¡Ven Señor Jesús! Muéstranos tus caminos y danos tu Salvación. Que sepamos encontrarte y COMPARTIR con el necesitado.
Pbro. Pablo Urquiaga.
Imagen de Cerezo Barredo
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