Venezuela es un país maravilloso; escogido por el Creador
para cumplir una Misión especial ante los demás pueblos de américa y el mundo.
Por eso tenemos que superar ésta “crisis
ética y moral” que nos daña y nos quita la Paz y atenta contra esa noble
Misión de ser “luz para las demás Naciones”.
En Venezuela tenemos de todo; recursos humanos y financieros;
recursos naturales (materias primas);
petróleo, gas, hierro, aluminio, etc.; paisajes naturales para el disfrute del
turismo internacional y ser un “País Potencia “para servir y no oprimir ni
explotar ni invadir a nadie. En la primera encíclica “EVANGELII GAUDIUM” (LA ALEGRÍA DE LA EVANGELIZACION) y en el
evangelio de Jesús de Nazaret encontramos los fundamentos éticos y morales para
superar ésta “crisis” y salir
victoriosos y fortalecidos de ella. Las crisis no son malas en sí; son
oportunidades que tenemos para “purificarnos”
y así seguir evolucionando y trascendiendo. “Errar es de humanos, rectificar es de sabios”, decía en gran Santo
San Agustín de Hipona. Para rectificar es necesario reconocer los errores y
aprender de ellos y así superarlos y trascenderlos. Necesitamos tener mucha “HUMILDAD” para entender que no tenemos
la “Verdad completa”. “Las
diferencias nos deben enriquecer y no enfrentarnos”, decía Don Hender Cámara,
Obispo de Recife, Brasil, y así construir el país grande que todos los
Venezolanos añoramos.
El Papa Francisco, en
el capítulo 2, número 57, nos dice al respeto: “Cuando el dinero gobierna en lugar de servir;
allí se esconde el rechazo de la ética y del mismo Dios”. Algunos economistas
sienten un tipo de “desprecio burlón”
y se le considera contraproducente porque relativiza el dinero y el poder. Para
ellos la economía no necesita “ética”
sino que la “mano invisible del libre
mercado” que lo arregla todo. La consideran como una “amenaza” pues condena
la manipulación de la propaganda y la degradación de los seres humanos. La
“ética y la moral Cristiana” nos lleva a un DIOS que está fuera de las categorías
del mercado. Una economía al servicio del ser humano y no un ser humano al
servicio de la economía y de las finanzas. Necesitamos una “ética no
ideologizada” que permita crear un equilibrio y un orden social más humano
donde obreros y capital puedan producir juntos en armonía y equidad para lograr
progreso y bienestar para todos (as).
“No compartir con los pobres los propios bienes es robarles y
quitarles la vida. No son nuestros los bienes que tenemos sino de ellos ya que
son “dones de Dios” (#55). Una reforma financiera que no ignore la “ética”,
requeriría un cambio de actitud radical por parte de los dirigentes políticos.
“El dinero y capital financiero debe estar al servicio y no para servirse de
los demás explotando al trabajador. El que no gobierne para servir, no sirve
para gobernar. Una “ética” que regule las finanzas en favor del ser humano.
Servirse del pueblo para enriquecerse es la forma más perversa de corrupción.
Otra crisis que padecemos es la INSEGURIDAD. Una de sus causas: LA IMPUNIDAD. Francisco nos sigue diciendo: “Hasta que no se
revierta la exclusión y la inequidad, será imposible erradicar la violencia.
Vivimos sin duda en un País violento”. Venezuela es de todos, no de una “ideología” o de un “´partido” o tendencia política que excluya a los demás. Ella nos necesita a
todos(as). Gente honesta y honrada hay en todas las tendencias ideológicas;
gente con ética, con Moral; como también existen “corruptos” en ambas
tendencias. Venezuela necesita integrar sus mejores hijos (ciudadanos honestos)
que ayuden a sacar a nuestra patria de la actual crisis que nos daña a
todos(as). Por eso decimos: NO A LA
EXCLUSIÓN de ningún tipo; solo los “corruptos”,
de todos los bandos, no podrán participar ya que son delincuentes. Ellos necesitan de “correccionales” (no de cárceles) para que tengan la oportunidad de regenerarse y así
poderlos incluir en la sociedad. Ese es nuestro primer RETO: NO A LA EXCLUSION por su manera de pensar.
Los LOGROS del proceso
Revolucionario como
son las MISIONES SOCIALES en Salud,
educación, cultura, vivienda y deportes, deben mantenerse pero deben “purificarse y potencializarse” para
que mejoren cada día. Debemos ser humildes y reconocer las fallas que las han
deteriorado; debe haber mayor “eficiencia
y eficacia” en la administración de las misma para limpiarlas de tanta
corrupción y de gente que se lucra “sirviéndose de los pobres para enriquecerse
a costa de ellos como lo ha denunciado el papa Francisco en varias ocasiones.
El horrible y vergonzoso sistema Judicial que aún tenemos necesita ser
transformado para que se acabe esa impunidad que trae inseguridad, falta de
Justicia, sobre todo a los más pobres y que se acaba la comercialización de la
Justicia y la persecución política.
Se acusa a los pobres de que son violentos pero sin igualdad
de oportunidades (equidad), las diversas formas de agresión y de guerra
encontrarán un “caldo de cultivo” que tarde o temprano provocará la explosión.
Muchas “guarimbas” son el fruto de
la “exclusión y la inequidad. Cuando hay marginación, no habrá “programa político” ni recursos
policiales que puedan garantizar la Paz. La reacción de los excluidos es
inevitable en un sistema económico injusto en su raíz. “LA PAZ ES FRUTO DE LA
JUSTICIA”. Pretender Paz en medio de la injusticia sería una INFAMIA.
Trabajemos y oremos por la PAZ EN VENEZUELA. AMEN
Pbro. Pablo Urquiaga.
Párroco.
Ruiz Pineda.
Caricuao (Nov. /2015)
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